“El formato más seguro de los ficheros sigue siendo el papel”, afirma, en plena visita, un guía en el Archivo General de Indias de la ciudad de Sevilla. Esta afirmación cualquier apasionado o especialista en Historia la firmaría. Después de tantas décadas y de tantos siglos, es posible recuperar, descifrar y comprender textos originales en papel, tanto manuscritos o mecanografiado. Sin embargo, un documento numérico tendría una esperanza de vida muy inferior, comparado con uno en papel, ya que las nuevas tecnologías están constantemente evolucionando y todavía no le vemos ningún límite. Los tipos de formatos son muy variados y su compatibilidad difiere en función de las últimas actualizaciones, de la antigüedad del dispositivo utilizado, de los softwares instalados, del sistema de explotación vigente, etc. Son muchos factores que pueden complicar la lectura de los documentos electrónicos. Una misma marca puede crear y proponer un coordinación y compatibilidad total entre sus propios dispositivos pero aquello supondría una entera dependencia a la marca por parte del consumidor y, por tanto, una posible pérdida de flexibilidad y de libertad.
Esta realidad tampoco tiene que restringir y obligar las empresas a volver al uso del papel. Esta decisión cuestionaría los ahorros significantes realizados hasta ahora, la responsabilidad de la empresa en cuanto al medio ambiente y la rápida y cómoda comunicación que existe hoy. Una vuelta hacia atrás es inimaginable y poco recomendable. La solución, por lo tanto, es encontrar unas alternativas que puedas mejorar esta compatibilidad y la inteligibilidad de los ficheros tanto entre individuos como entre empresas. Dicho de otra forma, unas alternativas que permitan facilitar la vida cotidiana.
La empresa myfax supo poner al día y hacer legible los documentos fax y eso para la mayoría de las empresas. Un avance importante: con este sistema de fax por internet, ya es posible, a través de myfax, y sin tener que cargar con la máquina, enviar fax desde y hacia correos electrónicos al formato pdf. Una innovación que contrasta con lo delicado que podía ser la comunicación entre nuevas startups y empresas ya establecidas desde hace tiempo. Myfax os promete un medio de comunicación sencillo, cómodo y rápido. Existen tres diferentes tarifas (bronce, plata y oro) que, además de ayudar a segmentar la clientela, os permitirá situarnos y gestionar algo de vuestro consumo y de vuestros gastos. La idea no está mal pero os merecéis más libertad.
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